Las Guerras de la Frontera cardassiana, como lo fue el
conflicto entre la Tierra y Romulus en la clásica, es uno de esos sucesos
que marcaron el universo de Star Trek en la era de The Next Generation y por
tanto en Deep Space Nine y Voyager. Y como suele suceder en esta saga se
desconoce la mayor parte de los aspectos de esta guerra, sobre todo sus causas
y su intensidad. Aunque para muchos de los personajes significó un trauma su
participación en este conflicto fronterizo.
Marco temporal:
Es mencionada por primera vez en The wounded (TNG, 4.12), primera aparición además de la raza de los
cardassianos en el universo de Star Trek. La información que ofrece este
capítulo de la guerra es muy importante: lo primero es situarnos su marco
temporal: nos dicen que se inició en el año 2347 con el ataque a Setlik III
(llamada masacre) por parte de fuerzas cardassianas. Además nos dicen acaban de
firmar una tregua, armisticio o alto el fuego, por lo tanto el conflicto se
alargó hasta el 2367, es decir que la guerra ha durado 20 años.
Desarrollo:
Conocemos por tanto que la guerra se inició con el ataque
a Setlik III, según el glinn Daro al creer que era para prevenir un ataque por
parte de la Federación. Este reconoció que el hecho fue “un terrible error”. En
el mismo capítulo, el capitán Picard recuerda que en su último encuentro con
los cardassianos, a bordo del USS Stargater
en el sector 21503, este tuvo que alejarse después que, en un gesto de buena
voluntad, desactivara los escudos, lo que fue aprovechado por la nave de guerra
enemiga para atacarles y dañar los motores de impulso y las armas. Como el
Stargazer fue dada por destruida en el 2355 durante la batalla de Maxia, este
encuentro tiene que haber ocurrido antes de ese año [The wounded (TNG, 4.12)].
Cuando Kathryn Janeway era teniente (no es especifica el
año) fue miembro de un equipo de misión que defendió un puesto avanzado contra
los cardassianos. La lucha se alargó durante semanas, terminando con un tiroteo
que duró 3 días [Prey (VOY, 4.16)].
Es posible que fuera cuando servía a bordo del USS Al-Batani bajo el mando del capitán Owen Paris, ya que este fue su
primer destino como oficial científico. El USS Tecumseh, bajo el mando del capitán Reymond, participó extensamente
en los combates [Nor the battle to the
strong (DS9, 5.04)].
El punto álgido del conflicto se vivió entre el 2355 y
2359 [ST:DS9 Technical Manual]. Y una
de las consecuencias se hizo sentir en el planeta Camor V, donde muchos de los
adultos camorites perdieron la vida, dejando numerosos huérfanos [Bloodlines (TNG, 7.22)]. En numerosas
ocasiones se desplegaron campos de minas graviticas, como en la década del 2350
en el sector Beloti. Años después estas minas causarían daños a la USS Denver, una nave colonial con 517
pasajeros y 23 tripulantes, haciéndose que se estrellara en un planeta del
sistema Mericor [Ethics (TNG, 5.16)].
Algunos de los sectores disputados durante la guerra son
la nebulosa McAllistes C-5 [Chain of
command, II (TNG, 6.11)]. Además de todos aquellos que se encuentran en la
Zona Desmilitarizada.
Consecuencias:
La desconfianza, tras tantos años de guerra, es mutua, y
en el 2367 el capitán Benjamin Maxwell al mando de la USS Phoenix, decide lanzar una serie de ataques por su propia cuenta contra
puestos avanzados y naves de transporte cardassianas en el sector 21505,
sospechando que estaban rearmándose para lanzar nuevas ofensivas. Aunque
interceptado por el USS Enterprise-D,
la presencia cardassiana en el estratégico sistema Cuellar, al alcance de tres
sectores de la Federación, hace a esta sospechar y vigilar estrechamente sus
intenciones [The wounded (TNG,
4.12)]. El tratado del 2367, negociado entre otros por el capitán Edward
Jellico, entregaba varios territorios en disputa a ambas partes, así como el
intercambio de prisioneros según la Convención de Seldonis IV y dejaba la
puerta abierta a futuras negociaciones [Chain
of command (TNG, 6.10/11)].
En el 2369, y a pesar del tratado de paz, la Flota temía
que también quisieran anexionarse el sector Igo [Realm of fear (TNG, 6.02)]. Además ese año los cardassianos
intentaron apoderarse del sistema Minos Korva, situado a cuatro años luz de su
frontera y siete de la nebulosa McAllister C-5 [Chain of command, II (TNG, 6.11)]. Y para defenderlo la Flota
habría enviado al sistema el USS Berlin,
la USS Aries y la USS Shutherland. (1) Entre las clausulas firmadas se encontraba la retirada de Bajor
en ese año, planeta ocupado desde el 2319 [Emissary
(DS9, 1.01/02)].
Finalmente en el 2370 se firmara el tratado de paz entre
la Federación y Cardassia, creando la Zona Desmilitarizada. Entre otras
cuestiones se trazaron las líneas definitivas de las fronteras de ambas
potencias, generando que colonias de uno y otro bando pasaran a formar parte
del otro bando [Journey’s end (TNG,
7.20)]. Con el Acuerdo de Jankata se indicaba que “ninguna de las dos especies
entraría en el otro cuadrante con el fin de una expansión territorial” [The Voyager conspiracy (VOY, 6.09)]. (2) Aun así el descontento de los
colonos y de algunos oficiales de la Flota que se sintieron traicionados con
este tratado, hizo que se creara una fuerza paramilitar con el objetivo de
defender a aquellas colonias de la Federación que había quedado dentro de la
frontera cardassiana llamada el Maquis [The
Maquis I (DS9, 2.20)].
Las pérdidas personajes fueron cuantiosas. Gul Evek
perdió a dos de sus tres hijos durante la guerra [Journey’s end (TNG, 7.20)], así como cientos de miles de
ciudadanos, lo que provocó la desmoralización entre la población [Chain of command (TNG, 6.10/11)]. Toda
la familia del capitán Benjamin Maxwell fue asesinada en Setlik III y el jefe
O’Brien se arrepiente de lo que los cardassianos le hicieron hacer: matar a
otros seres vivos. En esa batalla murieron Will
Kayden y Raymond Boone [The wounded (TNG,
4.12)]. Y políticamente hablando los embajadores Spock y Sarek
discreparon públicamente del conflicto, empeorando su relación personal [Unification I (TNG, 5.07)].
Percepción personal:
Este conflicto fronterizo, como es mencionado, se dilata
por lo menos 20 años, por lo que podemos deducir que su intensidad durante esos
años es variable. Las guerras fronterizas normalmente no son de gran
intensidad, esporádicos choques, repliegues, largas patrullas que no ocurre
nada y posteriormente una escaramuza, un ataque para controlar un sistema o
neutralizar una incursión enemiga. ¿Por qué llegar a esta conclusión? Entre
otros motivos porque se usa el término “guerras de la frontera” en plural, lo
que hace suponer una serie de conflictos o por lo menos periodos de calma o
alto el fuego entre los diferentes combates. Además si Picard, en su encuentro
a bordo de la Stargazer, baja los
escudos como gesto de buena voluntad podemos suponer que en ese momento no había
un conflicto abierto. Esta baja intensidad de los combates y la distancia
temporal de estos, haría más lógico que el conflicto se hubiera extendido
durante dos décadas.
Aunque Cardassia se plantean como una potencia similar a la Federación, también tiene sus limitaciones tecnológicas, estando algo por detrás en su desarrollo. Las naves de la clase Galor en el 2366 no pueden competir en igualdad de condiciones con la clase Nebula (que junto a la clase Galaxy serían las naves más avanzadas de la Flota Estelar), destruyendo la USS Phoenix a dos naves de guerra aun teniendo estas los códigos para desactivar sus escudos como se narra en o la capacidad de los sensores de largo alcance de la Federación en The wounded (TNG, 4.12). Poco después se especifica que el Tipo-3 de la clase Galor es considerado “de primera línea” en Ensing Ro (TNG, 5.03). Por tanto capaz de medirse con las clases Miranda, Excelsior y Ambassador, pero no con la última generación de naves estelares. Esto nos sitúa a Cardassia como una potencia que necesita toda su capacidad industrial para mantener una guerra contra la Federación. Por otro lado, podemos suponer, que si la guerra hubiera sido de mayor intensidad, el potencial humano e industrial de la Federación visto en la posterior guerra del Dominion, a pesar de su ética de no usar la violencia como primera opción, podría haber derrotado con facilidad a este adversario. También es posible que no se pusiera toda la carne en el asador para acabar con el conflicto al no verse amenazada su forma de vida o no se viera al adversario como una amenaza como sería el Dominion años después. O que los periodos de tranquilidad no hicieran presagiar que tardarían tanto tiempo en consolidarse la paz. También puede ser que subestimaran a los cardassianos.
La diferencia tecnológica puede ser dada por una
tendencia natural al retraso cardassiano o al propio desgaste de una guerra
prolongada. Aunque la expansión militar se le ha atribuido a la falta de
recursos naturales de los planetas y la necesidad de alimentar a la población. La
violencia con que se plantea la ocupación de Bajor hace suponer que durante la
guerra los combates fueron encarnizados y sin cuartel. Los recuerdos de O’Brien
del ataque a Setlik III así lo atestiguan y este sería el primer enfrentamiento,
por lo que el odio, el rencor y la revancha no estarían presentes en la mentalidad
de los combatientes. Por otro lado no podemos olvidar los retorcidos métodos
cardassianos, como la alteración quirúrgica para introducir agentes encubiertos
como Raymond Boone en Tribunal (DS9,
2.25) o Kira Nerys en Second Skin (DS9,
3.05). Así como las maniobras para encubrir los movimientos militares como en The wounded (TNG, 4.12).
Obviamente las menciones de esta guerra en The wounded (TNG, 4.12) no tenían en cuenta
las dimensiones que los cardassianos posteriormente tendrían en el universo de
Star Trek. Querían mostrar las heridas internas, que no siempre sanan, que
provocan los conflictos, en ese caso una batalla ocurrida 20 años antes. Pero
ellos mismo agrandaron el problema al mencionar que el alto el fuego se había
acordado ese mismo año. ¿Es que no pudieron reflexionar que entonces la Flota
Estelar hubiera estado en guerra durante dos décadas enteras? Tal vez los guionistas
usaron la propia historia de EEUU, haciendo un reflejo con la Guerra del
Vietnam que se prolongó con diferentes grados de presencia militar norteamericana
desde 1955 hasta 1975 (teniente su punto álgido a partir de 1965).
Las guerras de la frontera con Cardassia no han quedado
bien explicadas y lo peor es que parece que durante la propia realización de las
series los equipos de producción no les interesaron aclararlas mejor. Incluso
en Deep Space Nine apenas se la menciona y hubiera sido el marco perfecto para
conocer más detalles o simplemente haberla usado como trasfondo para los
personajes que aparecen y no solo la ocupación de Bajor. Se creó un nuevo
adversario retorcido y traicionero (que no fueran los romulanos), pero no se
pararon a crear un background más
elaborado (o simplemente les dio igual desarrollarlo) y como siempre ocurre,
los añadidos posteriores no siempre tienen en cuenta lo dicho anteriormente. Y
aunque este hecho no afecta a la concepción de esta raza, una de las de mayor
presencia en el universo Star Trek: la cardassiana, sí deja un poso de
extrañeza por parte de la Federación. ¿Por qué permitió que el conflicto se prolongara
tanto tiempo? ¿No podían o no querían vencer esa guerra? En todo caso deja a
Cardassia como un poderoso enemigo al que no es fácil de doblegar.
Ll. C. H.
Notas de producción:
(1) Según una línea del diálogo suprimida del capítulo.
(2) Es posible que de esta forma fijaran los límites de
expansión de los cuadrantes Alfa y Beta para ambas potencias. La frase indica
que cita Seven of Nine dice “especie”, pero teniendo que al Federación está
formada por muchas especies, hubiera sido mejor indicar “potencia”.