Vencer
en las Guerra Clon representó un gran reto para la República Galáctica por la
extensión del conflicto, y sobre todo por carecer, antes del inicio de las
hostilidades, de un ejército regular para defenderse. Tuvo por tanto que
organizarse sobre la marcha y armarse de la misma manera, invirtiendo sus cada
vez más menguados recursos en sus fuerzas navales y de asalto que protegieran su
unidad territorial. La proverbial aparición del Ejército de Clones la salvó de
ser aniquilada por las Fuerzas Separatistas del conde Dooku y sus inmensas huestes
de droides de batalla. Pero estos, aunque formidablemente adiestrados y
motivados para luchar por la República, necesitaban contar con equipos y
vehículos de combate. Por suerte el Senado tuvo a su lado algunas de las corporaciones
armamentísticas con mayor experiencia en la Galaxia, que les proporcionaron, a
una velocidad asombrosa, todo un moderno arsenal de primera categoría. Entre
los cazas diseñados y construidos especialmente para esta guerra destacaba el
pesado ARC-170. Este era un caza de reconocimiento agresivo construido por la
Corporación Incom/Subpro, que representó la base en la que se basarían modelos
posteriores, como el Z-15 Cazacabezas
y el T-65 Ala-X.
Perfil operativo
Las
gigantescas distancias que existen en la galaxia obligaban al Ejército de la
República a tener un caza de largo alcance equipado con hipervelocidad que no
necesitara una plataforma de despliegue. Ese fue el ARC-170, una plataforma
pensada tanto para realizas operaciones interestelares de varios días de duración
en solitario y muy lejos de sus bases o
naves madre internándose en las zonas controladas por la Confederación de
Planetas Independientes. Como no podría contar con apoyo y tendría que defenderse
de enemigos más grandes y poderosos que él fue provisto de un poderosamente
armado, que le permitía por tanto también realizar operaciones de ataque. Así
se diseñó una nave robusta y resistente pensada para patrullas e incursiones en
solitario gracias a su gran autonomía y al poseer un droide astrométrico que
podía realizar los cálculos automáticos.
Tenía
un fuselaje estrecho, con los depósitos de combustible en la parte central del
casco, flanqueado por dos potentes motores de empuje fusial 2L2 (1) que permitía alcanzar altas velocidades
tanto en el espacio, como en la atmósfera, llegando hasta los 44.000 km/hora
con los escudos activados. Esta extraordinaria velocidad se lograba gracias a
sus características alas transversales partidas S-foil que se separan para
dejar al descubierto los difusores de calor y los radiadores activos, que
refuerzan el sistema de escudos y a estabilidad térmica del caza. Además sus
proyectores del escudo, montados alrededor de las rejillas de los motores, podían
dispersar el calor generado a partir de la resistencia del aire, permitiéndole
alcanzar velocidades supersónicas en vuelos atmosféricos. Si sus objetivos
podían ser sorprendidos por la sorpresa y con una aproximación tan rápida se
podían burlar prácticamente cualquier defensa logrando un reconocimiento
completo o un ataque devastador. Además con las alas abiertas, donde se encontraban
sus difusores de calor y radiadores de refrigeración, se eliminaba mejor el
calor y se evitaba que tanto armas como motores se recalentaran durante el
combate.
La
pesada sección del morro aloja muy diversos sensores de largo alcance,
escáneres y perturbadores de señales, ideales para las misiones de
reconocimiento. Este caza recuerda a otras naves de guerra de Incom/Subpro
utilizadas por las fuerzas de la República en la Franja, siendo similares los
pesados bombarderos planetarios y navales PTB-625 y NTB-630 y el popular
monoplaza Z-95 Cazacabezas más
ligero, que tendrá como sucesor al caza Ala-X T-65 que utilizaría la Alianza Rebelde [SW III Vengeance of the Stih. Vistas en sección].
Tácticas
Como
caza de superioridad espacial eran demasiado lentos y poco maniobrables, por lo
que tenían que dejar esa función a otros más ligeros como los Ala-V o los interceptores
jedis Eta-2. Pero combinados con estos y gracias a su fuerte blindaje, sus
escudos y el potente armamento eran auténticos destructores y formaban una
formidable fuerza de ataque. Una táctica habitual era usar sus cañones pesados para abrir camino entre
la maraña de cazas buitre o tricazas de los separatistas, aumentando su supervivencia
al luchar contra decenas o incluso cientos de escurridizos cazas droides
gracias a sus armas de cola. Además sus pilotos solían variar sus maniobras y
tácticas a propósito para engañar a los programas de sus droides adversarios,
lentos a la hora de adaptarse a otros patrones que no estuviesen programados.
De manera que estos pesados cazas también eran excelentes para grandes batallas
navales, como durante la Defensa de Coruscant durante las fases finales de la
guerra [SW III Vengeance of the Stih].
En
operaciones planetarias se dejaba para otros modelos más rápidos y ágiles la
superioridad aérea, usando su mayor resistencia gracias a sus escudos para
actuar como escoltas de las cañoneras LAAT o de otros cazas, como los
bombarderos Ala-Y [The zillo beast (The
Clone Wars, 2.18)]. Gracias a su capacidad de transportar 6 torpedos de protones les permitía ser
utilizados en incursiones y ataques de precisión, sobre todo cuando podían
combinar su gran velocidad atmosférica y la sorpresa, permitiendo que sus
aproximaciones fueran casi indetectables hasta estar sobre su objetivo.
Así
los ARC-170 demostraron ser los cazas versátiles más poderosos de las fuerzas
republicanas, encabezados por los granes cañones láser, tremendamente eficaces
contra adversarios de mayores dimensiones.
Historial de
servicio
Durante
las Guerra Clon estas naves fueron desplegadas en toda la galaxia, en lugares
tan distantes entre sí como Malastare, Bomis Koori IV, las sucesivas batallas
en Geonosis, en Cato Neimoidia o defendiendo Coruscant. Las flotas
republicanas, como la del Círculo Abierto dirigida por los generales Kenobi y
Skywalker, incluían miles de ellas, así como otros cazas que soportaban meses
de penurias en los crueles asedios de la Franja Exterior. Una de las unidades
de ARC-170 más curtidas fue el Pelotón Siete, un disciplinado equipo de
veteranos aviadores famosos por su valentía sin par integrado por clones originales
de Jango Fett, el cazarecompensas que actuó de modelo genético para los
primeros soldados clon. No obstante a medida que transcurría el conflicto
también un número creciente de unidades se formaron a partir de voluntarios muy
selectos, algunos de los cuales podría servir para crear nuevos linajes de
clones, distinguiéndose con uniformes totalmente negros [SW III Vengeance of the Stih. Vistas en sección].
Pocos
meses después de finalizar las Guerras Clon el recién nombrado Emperador
Palpatine creó una serie de Escuadrones Sombra con el objetivo de eliminar a
los últimos simpatizantes de la antigua República y separatistas rezagados.
Gracias a su autonomía y si poderoso armamento, estas nuevas unidades fueron
persiguiendo a sus adversarios, destruyendo las instalaciones tácticas y los
refugios de aquellos remanentes republicanos, con la intención de destruir toda
resistencia a su autoridad [Comic: Dark
times 1: The path to nowhere]. Al resto de escuadrones recibieron el
esquema color “gris imperial” estándar, eliminando la variedad de marcas y
afiliaciones que habían identificado las naves durante las Guerras Clon,
unificándolas alrededor del Nuevo Orden. Participando en operaciones a lo largo
de toda la galaxia, como el desastroso ataque a Ostor dirigido por Lord Vader [Comic: SW: Darth Vader and the Cry of
Shadows].
Con
la consolidación del Imperio Galáctico y la transformación de la Armada y sus tácticas navales los
ARC-170 poco a poco fueron relegándose del servicio activo [Novela: Tarquin]. Su declive definitivo se produjo con el cambio
de doctrina hacia el uso de cazas sin propulsor de hiperespacio con el
alistamiento de los modelos de familia TIE, provocando que las últimas unidades fueron desmanteladas. Algunos
sistemas afines aun mantuvieron algunos escuadrones activos e incluso otros
llegaron a manos de piratas y corsarios. Y aunque ya se consideraban naves
anticuadas, la Alianza Rebelde logró
tener un puñado de estos cazas, que por su poderoso armamento y autonomía, aun
se les consideraba escuadrones de élite, en el que formaron parte famosos
pilotos como Braylen Stramm o Norra Wexley [ST:
X-Wing miniatures game. ARC-170 Expanson pack].
Fabricación: Corporación Incom/Subpro
Modelo: Caza estelar
ARC-170 (reconocimiento agresivo)
Dimensiones:
Longitud:
14,4 metros
Envergadura:
22,6 metros
Altura:
4,78 metros
Planta motriz: dos motores de
empuje fusial 2L2 [especulación]
Aceleración
máxima (lineal, en el espacio): 2.600 G
Velocidad máxima
(en atmósfera normal): 1.000 km/h
Velocidad máxima
(en atmósfera normal): 44.000 km/h
(solo con los escudos)
Alcance: 5.000 años luz
Fungibles: aire para cinco
días
Capacidad de
carga:
110 kg
Tripulantes: tres
(piloto/copiloto/artillero), un driode astromecánico
Armamento: 2 cañones láser medios, 2 cañones láser
en popa, 6 torpedos de protones
Notas de
producción:
(1) Este dato es
una especulación ya que no se ha mencionado nunca el modelo de motor que llevan
estos cazas, lo cual es extraño en el universo de Star Wars tan dado a este
tipo de detalles. El nombre está basado en los motores 4L4 con que están
equipados los Ala-X y como estos son
los sucesores del ARC-170, me ha parecido adecuado bautizarlos así.
Ll. C. H.
Links de interés:
Este caza siempre me parecio un "cruce extraño" entre un X-wing de Star Wars y un Thunderbolt de Babylon 5,,, pero es que yo soy muy rara
ResponderEliminarHola Bel!
EliminarLo que me gusta del ARC-170 es precisamente esa mezcla extraña que tiene. En él se puede ver cierto parecido con el Ala-X, pero sin llegar a serlo.
El parecido con el Thunderbolt no lo había visto, hasta ahora, ajajaj!
Ll. C. H.