domingo, 4 de febrero de 2018

Discovery What's Past Is Prologue

What's Past Is Prologue


Cuidado, a continuación hay SPOILERS!!

Este es el capítulo más épico de la serie al mejor estilo de Kirk, y volvemos a tener otra referencia a William Shakespeare en el título: “El Pasado es un prólogo” es una frase del segundo acto, escena primera de La Tempestad. Aquí los villanos pierden y nuestros héroes retoman el control de la situación logrando regresar a su universo. Así concluye la estancia y posiblemente trama del Imperio Terrano, lo cual es un acierto, ya que centrarse en ella con más episodios hubiera sido alargarla demasiado e innecesariamente. De esta manera la historia queda condensada al descubrir al villano y regresar al hogar, pero claro esto es Discovery, el reverso de Star Trek, y el hogar no está exactamente igual de cómo lo dejaron. Y aunque parece que las líneas argumentales salten tanto como si utilizaran el motor de esporas, de esta manera se evitan capítulos de relleno, como ocurrió con alguno de la primera parte de la temporada.

Empecemos por algunas especulaciones que escribí en la reseña anterior y que no se han cumplido. Lorca no terminó en el universo primario a través de la red micelial, sino de la misma manera que Kirk y sus compañeros en Mirror, mirror (ST, 2.10): por un fallo del transportador afectado por una tormenta de iones. Y aunque Stamets espejo sí trabajaba con la tecnología de esporas, su objetivo no era viajar con ellas, sino usarlas como fuente de energía para armas de destrucción planetaria. Lo que sí permitiría a Locar conocer básicamente los conceptos de esta y deducir que se podía utilizar para regresar al Imperio para apoderarse de él. Ellen Landry espejo vivía, por lo que su contrapartida del universo primario sigue siendo una descerebrada por haberse enfrenado al tardígrado gigante sabedora que era una máquina de matar. Había imaginado a Lorca como un revolucionario, pero no era más que un fanático xenófogo imbuido por la ambición digno del Imperio Terrano.

La noche es más oscura junto antes del amanecer
Este era Gabriel Lorca, que había arrastrado al lado oscuro a la tripulación de la Discovery por caminos poco éticos embaucándoles al decirles que su trabajo era para un bien mayor. Como dijo Picard en The drumhead (TNG, 4.21): “Los villanos que se retuercen el bigote son fáciles de reconocer. Los que se visten de buenas maneras están bien camuflados”. Ya escribí en la reseña de Vaulting Ambition (DIS, 1.12) que muchos habían visto en el capitán de la Discovery como aquel personaje duro, que ha de hacer lo que sea necesario para lograr su objetivo, en su caso ganar la guerra contra los klingons. Por otro lado un fin legítimo para un militar o un miembro de la Flota Estelar cuyo deber es defender a la Federación. Pero esquivar la ética esto era algo que contradecía con las acciones del resto de capitanes vistos hasta la fecha: en mencionado Picard, cuya rectitud y dotes diplomáticas hacían que intentara resolver todos los conflictos dialogando, o Janeway que obligó a su tripulación a un viaje de regreso de 7 años al destruir la estación del Caretaker. Kirk es pura aventura, Archer un explorador un poco incauto, excepto en la tercera temporada y Sisko estaba metido en tantos líos que a veces no sabía muy bien que hacer. A veces es bueno recordar que Star Trek es una utopía sobre lo que podría llegar a ser la humanidad si nos uniéramos, dejando nuestros conflictos a un lado y prosperáramos buscando el bien común. Por tanto nuestros héroes han de tener esa pátina de rectitud que a veces pueda parecer que se haya perdiendo cierta noción de realismo. Eso es lo contrario de la actitud de Lorca, y por eso algunos encontraban adecuada para un comandante de la nave estelar. Y aunque personalmente me gustaba como personaje, porque era lo contrario a los estereotipos que hasta entonces teníamos y porque un poco de mal rollo nunca va mal para amenizar cualquier serie, no me convencía como oficial de la Flota. En este capítulo podemos ver al Lorca real, desatado y sin tener que fingir, liderando por fin su revuelta para coronarse Emperador y la verdad me ha parecido demasiado histriónico. Le prefería más comedido, teniendo que fingir y manipular a todos mientras estaba sentado en la silla de mando, y no como psicópata terrano. Así que está bien hecho, lo que bien acaba. ¡Larga vida al Emperador! Sea, quien sea.

¿Pero qué me has hecho?
El otro protagonista del capítulo, aunque eclipsado por Lorca, es la Emperatriz Philippa Georgiou, la cual no solo sale derrotada por el plan de su antiguo esbirro, sino que queda descafeinada en comparación con el antiguo capitán de la Discovery. Y es que Georgiou no termina de ser la gran malvada líder de Imperio. Su enemigo no duda en usar armas químicas y ejecutar a todo el que no le jura lealtad, en cambio ella se dedica a torturar a quienes se convertirán en la quinta columna que asaltarán y conquistarán su nave, además de ser muy indulgente con la propia Burnham. Me da la sensación que Lorca tenía razón cuando la considera débil frente a otras razas alienígenas. Su grandeza aparece al final, cuando se sabe derrotada para seguir al frente del despiadado poder terrano, decide sacrificarse para que el reverso de su hijastra del otro universo logre sobrevivir. Por eso la frase que le dice a esta a bordo de la Discovery describe perfectamente la situación: “¿Pero qué me has hecho?”, tras haberse hecho a la idea que iba a morir.

Heredera del Imperio
Burnham al descubrir la naturaleza de Lorca se da cuenta que lo que la ha llevado hasta allí es una falsedad, ha de intentar a toda costa salvar a su tripulación, a sus amigos. Y durante todo el capítulo la vemos con una determinación y habilidad digna de los héroes que nos tiene acostumbrado Star Trek. Por eso no tiene mucho sentido su último gesto altruista con la Georgiou terrana, al salvándole la vida deja claro que aún no deja de ver a su mentora, la que la acogió tras dejar su hogar y el lugar donde había crecido y educado. Lo que aún está por ver y tengo muchas ganas, es lo que sucede con la Emperatriz en un lugar como la Federación, por muy derrotada que esté frente a los klingons.

A bordo de la Discovery
Una vez descubierta la verdadera naturaleza de Lorca la tripulación de la USS Discovery vuelve a ser la conocida Flota Estelar y la verdad es que les echaba un poco en falta, poniéndose manos a la obra para resolver el problema. Con Stamets recuperado ya pueden pensar de nuevo en usar el motor de esporas y el trabajo en equipo y esa iniciativa, del más puro estilo de la Flota, queda reflejada en el discurso de Saru. Quien representa ese comandante que ha de guiar a su tripulación, manteniéndose firme y al timón para guiarlos a través de las olas, evitando que el buque naufrague, como les ocurre a los protagonistas de La Tempestad, cuyo título en el capítulo hace referencia. Ya dije que el kelpiano me gustaba, sobre todo cuando dejaban a un lado el rollo del miedo de su raza, como precisamente han hecho al dejarlo al mando de la nave de una manera muy serena y profesional.

La guerra perdida
Y como ocurría al final de Into the forest I go (DIS, 1.09) la nave vuelve a estar en el lugar que no le corresponde. O en este caso en el tiempo. Si me dejáis especular la situación es perfecta para viajar al pasado a través de la red micelial para evitar que la Federación pierda la guerra contra los klingons. ¿Lo harán? Espero sinceramente que sí, aunque para ello haya que romper la Primera Directriz y también la Temporal, en el caso que en el 2255 esté implantada, claro. En realidad tiene tres episodios para solucionar las cosas y dejarlas más o menos como estaban. La cuestión es si regresan al momento de su viaje al universo espejo, recordemos que la ISS Discovery se supone que saltó al universo primario o antes de la Batalla de las Estrellas Binarias. Si hacen esto último evitarían que Stamets desarrollara el motor de esporas (o champiñones) y recuperaríamos al doctor Culber. Aunque como T’Kuvma estaba convencido en lanzar su llamamiento contra la Federación, solo destruirle antes sería posible evitar la guerra. Eso además permitiría que Burnham no se amotinara contra su capitán, precisamente a quien acaba de salvar la vida, en el universo espejo.


Ll. C. H.

Links relacionados:


2 comentarios:

  1. Saludos, te comento mi impresion ,por lo que pueda valer, de este capitulo, antes de ponerme a ver el proximo (mas por "inercia esperanzada" que por otra cosa).
    Comentas el histrionismo malevolo de este "Lorca desencadenado" y coincido plenamente, de hecho entre el vestuario recargado, los escenarios grandilocuentes y las parrafadas de Lorca ,,,si le quito el color y lo veo en blanco y negro parece un episodio del "Capitan Proton contra el Dr. Caotica",,,, ¡Esos dialogos de malo de James Bond!,," Ah señor Burham ,veo que ha escapado de mis guardias otra vez,,,lo arrojaremos a mi piscina de lava micelial" o ese "Unete a mi y juntos gobernaremos la galaxia" (esa creo haberla oido hace poco no se donde)...En fin , volvemos al universo prime, se supone, y a ver por donde me salen...Al menos Saru se ha reivindicado un poco y ya si parece un miembro de la Flota , en dos parrafos a puesto nombre y funcion a los figurantes del puente, ¡Que ya era maldita la hora!, y ha hablado y actuado con sensatez y etica,,, algo que Burham por cierto sigue sin hacer ,¿Que logica vulcana la empujo a traerse a una emperatriz Nazi y xenofoba a este universo? me esta resultando que el Consejo vulcano no andaba tan desencaminado cuando no la veia como miembro viable de su Academia....
    Bueno no te doy mas la tabarra ya nos contaras que opinas de la ISS Charon o como se llame el mamotreto ese donde estaba el "Trono de Tuberias" de poniente,,digoooo del Imperio Terrano :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas,

      Pues sí Lorca parece haber saludo de la holonovela del “Capitán Protón contra el Dr. Caotica” y es una lástima, porque hasta entonces este era un villano maquiavélico, meticuloso, paciente y por ello muy peligroso, pero al final lo ridiculizan, desvirtuando al personaje que tanto les había costado crear. Una lástima, la verdad.

      Siempre dije que Saru era un personaje muy interesante, me recuerda en cierta manera a Spock por lo controlado y comedido que es. Eso cuando no nos hacen recordar lo del miedo de los kelpianos. Por suerte en este capítulo no abusan de ello.

      Y disculpando a Burnham, la Emperatriz le estaba salvado la vida al retener a los últimos soldados de Lorca, así que su gesto altruista también es una manera de devolverle el favor.

      Y sobre la ISS Charon… me reservo para un artículo lo que pienso de esta y el resto de naves de la serie. Así tengo un tema que escribir.

      Un saludo!
      Ll. C. H.

      Eliminar